El secreto de un viajero para comer bien con un presupuesto bajo

Por Liz Sanders MPH, RD | Jun 06 2016
Última actualización Jun 08 2016

La comida es una de las mejores partes de viajar. Pero entre el costo de los boletos de avión, reservas de hoteles y alquiler de coches, incluso para el viajero que organiza mejor su presupuesto, se puede terminar con problemas de dinero cuando es hora de comer. No tienes que desembolsar grandes cantidades de dinero en restaurantes con estrellas para comer de lo mejor que un país tiene para ofrecer. Tampoco tienes que deshacer tu presupuesto para saborear una sana y   deliciosa comida local. Un secreto que aprendí en un viaje reciente a Islandia: Comer bien con poco presupuesto es hacer las compras como los lugareños.

No tienes que gastar mucho para conseguir una experiencia local sabrosa. En Islandia, hay golosinas de bajo costo y saludables en cada esquina. Sólo tienes que saber dónde buscar. Ir de compras en supermercados y tiendas de conveniencia nos ahorró muchas coronas (que es la moneda islandesa), e incluso, nos dio más tiempo para hacer senderismo y turismo.

Skyr es un producto omnipresente en las tiendas de comestibles de toda Islandia. Este producto lácteo de bajo contenido en grasa y alta proteína es la versión islandesa del yogurt griego. Por las mañanas, nuestro viaje comenzaba con algunos skyr, fruta y café de una tienda de conveniencia. Este desayuno marcó todas nuestras paradas: barato, rápido, saludable y lleno de nutrimentos. Skyr también sirvió como un gran medio para alimentarnos a través de las caminatas.

Rúgbrauð (pero difícil de pronunciar) es otro sabroso y barato islandés básico. Este pan de centeno denso se hace con granos enteros y tiene un sabor afrutado profundo. A veces, este pan también se conoce como “pan de géiser (hverabrauð)” cuando se cocina en hornos de arcilla que son calentados por resortes geotérmicos.

Rúgbrauð era fácil de encontrar en los supermercados, especialmente en el norte de Islandia. Sandwiches (incluso una simple mantequilla de maní y plátano) hecho con rúgbrauð, sirvieron como parte de un almuerzo fácil y barato durante largos días de ir conduciendo. Pero ojo: si come se demasiado rúgbrauð, podrás entender por qué a este pan lo apodan “pan de trueno.” Te dejaré usar la imaginación.

En los Estados Unidos, “local” no siempre significa bajo costo. Sin embargo, en Islandia, la elección de los alimentos producidos localmente, es una excelente manera de reducir gastos mientras se cena fuera. Los alimentos tradicionales hechos con ingredientes locales, como sopas de cordero y pescado, son a menudo las opciones menos costosas en los menús.

No tienes que ir a Islandia para poner estos consejos en práctica. Hay que buscar opciones exclusivas de comestibles de bajo costo durante todos tus viajes internacionales. Y recuerda, con un poco de creatividad, comer bien en el extranjero siempre puede ser económico.