Por Alyssa Ardolino, RD | 20 de marzo del 2017
Última actualización 24 de octubre del 2017
De acuerdo, así que te has dado a la tarea de preocuparte por tu salud y estás listo para comprar alimentos saludables en el supermercado. Sabes que necesitas granos integrales, carnes magras, productos lácteos bajos en grasa, frutas y verduras. Excelente. Pero, ¿por dónde se empieza?
Un buen lugar para empezar podría ser si vas a comprar alimentos frescos vs. alimentos congelados. Fresco siempre es mejor, ¿verdad? Pues no exactamente. Dependiendo de la época del año, la tienda de comestibles y las preferencias personales, elegir algunos alimentos congelados en lugar de frescos pueden ahorrarte tiempo y dinero.
Queremos mostrarte un ejemplo en el que te resultará beneficioso elegir congelados en lugar de frescos. Hablemos de maíz. El maíz congelado pesa más que el fresco en tres categorías principales:
1. Tiempo
En realidad, toma menos tiempo preparar maíz congelado que fresco, ¿quién iba a saber?
Congelado: 7 minutos
Fresco: 15 minutos
2. Costo
Por porción, el maíz congelado es menos costoso que el fresco. ¿A quién no le gusta un buen precio?
Congelado: $ 0.24
Fresco: $ 0.53
3. Valor Nutrimental
El maíz congelado a menudo tiene menos calorías que las frescas, lo que puede ayudar a controlar el peso.
Congelado: 60 calorías, 0.5 g de grasa, 14.4 g de carbohidratos, 1.9 g de proteína, 0.7 mg de sodio
Fresco: 72 calorías, 1,1 g de grasa, 15,6 g de carbohidratos, 2,5 g de proteína, 0,7 mg de sodio
La próxima vez que compres, considera las diferencias entre alimentos frescos y congelados. Cada persona sopesará los diversos factores de forma diferente en función de sus necesidades y preferencias individuales, así que trata de encontrar la mejor solución para ti.