Por Tamika Sims, PhD | 5 de julio del 2018
Última Actualización 5 de julio del 2018
Para la última entrega de nuestra serie de leche, pensamos que sería una buena idea sumergirse en la leche de coco. Además, es posible que quieras empezar antes a celebrar el Día Mundial del Coco (2 de septiembre). Incluso si no celebras, puede que hayas notado que esta bebida tropical ha crecido bastante en popularidad en los últimos años, lo que puede estar enraizado en el hecho de que nos ofrece otra alternativa a la leche de vaca.
Al igual que la leche de almendras y de soya, se espera que las ventas de leche de coco continúen aumentando en los próximos años. Un informe reciente ha proyectado que el mercado de la leche de coco crecerá un 7.5 por ciento anualmente para el año 2023. Parece que los cocos son útiles para mucho más que simplemente pasteles de crema de coco y piña colada, pero ¿cómo se elabora la leche de coco?
Donde comienza la leche…
El coco es una especie de árbol tropical cultivado y cosechado principalmente por pequeños agricultores. Su éxito depende en gran medida de la amplia disponibilidad de agua, pero también pueden crecer en una amplia variedad de suelos. Los cocos se cultivan en más de 90 países y los cuatro principales productores son Indonesia, Filipinas, India y Brasil. Mientras que los cocos crecen en muchos países, sus hábitats naturales se encuentran en las zonas costeras y las franjas de los desiertos, donde es probable que la lluvia y la humedad sean altas.
Los cocos no están realmente descocados; son frutas en la familia de las drupas o “frutas de hueso”, que también incluye albaricoques, cerezas y melocotones. El grano de coco (también llamado “copra”) y el agua son dos partes comestibles que forman los ingredientes fundamentales para una variedad de productos de coco, que incluyen agua de coco, aceite, crema y, por supuesto, la leche de coco.
Quiebra un “coco”, saca la leche
Específicamente para la producción de leche de coco y crema, los cocos deben madurar entre 10 y 13 meses, cuando el grano de coco es duro y espeso. Tanto la leche como la crema, se consideran emulsiones naturales de aceite en agua que se extraen de granos de coco maduros, a los cuales se la ha quitado las cáscaras y las conchas. En las plantas de procesamiento de coco integradas, el subproducto de agua de coco también se recolecta perforando el coco antes de descascarillar o reduciendo a la mitad los cocos después del descascarado.
Después de descascarillarse, la piel fina y marrón del coco se elimina hasta que el grano blanco quede expuesto. El grano se lava, se drena y se ralla mecánicamente en hojuelas de almendra que se presionan para extraer la leche de coco. Para manipular los niveles de grasa y aceite en el producto final, se puede alternar la cantidad de agua añadida a los copos durante el proceso de extracción.
Después de la extracción, la leche de coco se filtra para eliminar los contaminantes grandes. En su etapa final de producción, la leche de coco se pasteuriza y se envasa de forma aséptica en envases -esterilizados para que sean estables y no requieran refrigeración- y luego se transportan para su venta.
La composición final de la leche de coco depende del tipo de grano de coco utilizado, el nivel de madurez del coco (los más viejos tienen mayor contenido de aceite) y las condiciones de crecimiento, así como si la piel marrón se ha eliminado del grano. No eliminarlo durante el procesamiento puede producir una leche con un sabor más amargo.
Notas nutrimentales de la leche de coco
La leche de coco es un tema candente en estos días, pero existe mucha controversia sobre si la leche de coco y el aceite son saludables. Si observamos la etiqueta nutrimental, verás que la leche de coco contiene muchas más grasas saturadas que otras leches, con aproximadamente 25 g de grasa saturada en ½ taza de leche. Las Guías dietéticas para los estadounidenses nos aconsejan que limitemos nuestra ingestión de grasas saturadas.
La leche de coco también contiene algunos triglicéridos de cadena media (MCT), que se han asociado con algunos beneficios para la salud, pero no hay tantos como en el 100 por ciento de aceite MCT. Si bien la investigación sobre las grasas saturadas está en constante evolución, este video nos ayuda a comprender mejor el papel de las grasas en nuestra dieta.
En pocas palabras: si te gusta el sabor de la leche de coco, tómala de vez en cuando. Pero si crees que es una cura para todos los males, probablemente estés equivocado.
Últimas Reflexiones
Esperamos que hayas disfrutado de nuestra “serie de leche”. Si bien muchos de nosotros fuimos criados con leche de vaca y seguimos disfrutando de ella como una opción de bebida saludable, hay otras opciones para personas que desean probar algo diferente o que buscan productos no lácteos para acompañar su plato de galletas o en sus tazones de cereal.
Este blog incluye contribuciones de Alyssa Ardolino, RD.