Por Marisa Paipongna
14 de septiembre, 2022
A menudo escuchamos sobre la importancia de elegir alimentos saludables, pero ¿cómo definen los estadounidenses un “alimento saludable”? ¿Y qué tanta influencia tiene algo saludable cuando decidimos qué alimentos comprar y comer? La 17.ª Encuesta Anual sobre Alimentación y Salud de 2022 de IFIC exploró las perspectivas y los comportamientos de los estadounidenses en torno al término “saludable”. Sigue leyendo para conocer las formas en que este concepto afecta nuestras elecciones de alimentos.
La influencia de la “salud”
Durante la última década, la idea de “salud” se ha clasificado constantemente como el tercer impulsor de compra más influyente para alimentos y bebidas, y este año no fue la excepción. El sesenta por ciento de los encuestados dijo que lo saludable tuvo “algo” o “gran” impacto en su decisión de comprar alimentos y bebidas, quedando atrás del sabor (80%) y el precio (68%). Los subgrupos que tenían más probabilidades de decir que lo saludable tuvo un impacto incluyeron a los Millennials (65 %, frente al 53 % de la Generación Z y el 56 % de los Boomers); los que tienen un ingreso anual de $75.000 o más (73%, frente al 50% de los que ganan menos de $35.000 al año y al 56% de los que ganan entre $35.000 y $74.000 al año); padres de hijos menores de 18 años (71%, frente al 54% de los que no tienen hijos menores de 18 años); y los que compran comestibles en línea más de una vez al mes (67 %, frente al 51 % de los que nunca compran comestibles en línea).
Definición de alimentos saludables
A pesar del énfasis constante de los estadounidenses de lo saludable en sus elecciones de alimentos, la encuesta de este año también deja en claro que existe una gran variación en la definición y percepción de lo que es “saludable” por parte de los consumidores. Cuando se les pidió a los encuestados que seleccionaran hasta cinco atributos diferentes que definen un alimento saludable, las respuestas más populares fueron “fresco” (37 % lo seleccionó), “bajo en azúcar” (32 %) y “buena fuente de proteínas“. (29%). Estas opciones principales fueron seguidas por “contiene frutas o verduras (o incluye estos ingredientes)” (28 %), “buena fuente de nutrimentos” (27 %) y “natural” (26 %).
¿Por qué estos atributos específicos se asocian comúnmente en nuestra mente con que un alimento o bebida sea saludable? Exploremos más a fondo cada uno de estos términos.
Fresco y Natural
La gravitación hacia atributos como “fresco” y “natural” puede deberse a la percepción de que los alimentos sin estos rasgos no son saludables. Por ejemplo, cuando a los encuestados se les presentó un escenario en el que había dos productos con la misma etiqueta de información nutrimental, pero uno era fresco y el otro congelado, el 48 % dijo que era “algo” o “altamente” probable que el producto fresco fuera más saludable que el producto congelado. Solo el 10% dijo que era probable que el producto congelado fuera más saludable. Esta tendencia también surgió cuando a los encuestados se les presentó un escenario similar en el que un producto tenía “totalmente natural” en la etiqueta y el otro no. En este ejemplo, más de la mitad (51%) dijo que era “algo” o “altamente” probable que el producto “totalmente natural” fuera más saludable que el que no tenía esta etiqueta; sólo el 10% dijo lo contrario.
La asociación entre “saludable” y “natural” es particularmente evidente cuando observamos más de cerca los comportamientos de compra. Cuando se preguntó a los encuestados qué productos compran regularmente debido a ciertas etiquetas, “natural” encabezó la lista, con dos de cada cinco (39 %) que dijeron que compran regularmente productos con esta etiqueta. Curiosamente, los Millennials eran más propensos a decir que “natural” era un atributo de un alimento saludable y a decir que compran productos regularmente porque están etiquetados como naturales. Entre quienes compran productos debido a esta etiqueta, la razón más popular escogida para hacerlo fue que “los alimentos naturales son generalmente más saludables para ti” (54 %).
Bajo en Azúcar
La popularidad de “bajo en azúcar” como marcador de un alimento saludable no es sorprendente, ya que casi tres de cada cuatro (73 %) informan que tratan de limitar o evitar los azúcares. Los boomers tenían más probabilidades de seleccionar “bajo en azúcar” como atributo principal de un alimento saludable (con un 38 %, frente al 24 % de la generación Z y el 27 % de los millennials) y también eran más propensos a decir que tratan de limitar los azúcares en sus dietas (61%, frente al 46% de Gen Zers).
Proteína
Teniendo en cuenta que la proteína encabezó la lista de los nutrimentos más buscados en la encuesta de este año (teniendo a un 59 % tratando de consumirla), no sorprende que los estadounidenses relacionen la idea de “saludable” con una “buena fuente de proteína”. En comparación con la encuesta de 2021, más estadounidenses dicen que están comiendo más proteínas integrales de origen vegetal (un 31 % dice que comen más ahora), aves o huevos (27 %), lácteos (25 %), otros lácteos de origen vegetal (23 %) y leche y yogurt fortificados a base de soya (18 %).
Frutas, Vegetales y Nutrimentos
De manera similar, la popularidad de las opciones “buena fuente de nutrimentos” y “contiene frutas o verduras (o incluye estos ingredientes)” como atributos de un alimento saludable es algo predecible, ya que los recursos de educación nutrimental comúnmente enfatizan una ingestión suficiente de frutas, verduras, y vitaminas y minerales. Las frutas y verduras se encontraban constantemente entre las opciones de alimentos más comunes citadas por los estadounidenses para lograr cada uno de los siguientes beneficios para la salud: energía o menos fatiga, pérdida de peso o control de peso, salud digestiva y salud intestinal, salud cardíaca y cardiovascular, y salud inmunológica.
Los estadounidenses también informan que intentan activamente consumir una variedad de nutrimentos, lo que puede impulsar aún más sus asociaciones con respecto a lo que se considera saludable. Más de la mitad (57 %) de los encuestados informaron haber intentado consumir vitamina D, seguidos de cerca por la vitamina C (56 %), la fibra (53 %) y el calcio (53 %).
De “natural” a ser una “buena fuente de proteínas”, está claro que entre los consumidores no existe una definición única de un alimento “saludable”. Para obtener más información, consulta la Encuesta Sobre Alimentos y Salud de 2022 aquí.
Este artículo fue revisado e incluye contribuciones de Ali Webster, PhD, RD.