Por Alyssa Ardolino, RD | 24 de abril del 2018
Última actualización 27 de abril del 2018

El desperdicio de alimentos es un problema continuo en los Estados Unidos. Un nuevo estudio informó que se desperdician casi 150,000 toneladas de alimentos o alrededor de una libra por estadounidense diariamente. Recientemente, los “consumidores saludables” han sido señalados como los peores ofensores, siendo los productos frescos los alimentos más desperdiciados. Pero, ¿quién quiere que le digan que están contribuyendo a desperdiciar cuando solo están tratando de comer frutas y verduras?

Si bien es posible que estés tratando de mejorar tu cuerpo aumentando la ingestión de los productos frescos, es posible que necesites algo de inspiración para ser creativo con la forma de comprar y utilizar los comestibles. Echemos un vistazo a algunos consejos prácticos que pueden ayudarte a ser más consciente a la hora de que escojas los alimentos y reduzcas la cantidad de comida que desperdicia.

1. Sé creativo en casa

Con demasiada frecuencia asumimos que debido a que es el día de compras, automáticamente necesitamos abastecernos de X, Y o Z en el supermercado. Trata de que al menos un día cada semana, prepares de comer con los alimentos que todavía tienes, ya sea carne en el congelador, productos enlatados en la despensa o las verduras olvidadas ahí en el cajón. También puedes considerar renovar su refrigerador colocando productos en áreas más visibles.

2. Termina ahora o termina después

La alimentación consciente se trata de tomar conciencia a la hora de comer. Una práctica común es darse cuenta de todos los diferentes aspectos sensoriales de los alimentos (sabor, textura, aroma, etc.), mientras se limitan las distracciones durante las comidas. Emparejar la alimentación consciente con la alimentación intuitiva (que tiene como objetivo eliminar las normas alimentarias y devolverle la alegría de comer), puede ayudarte a concentrarte en las señales de hambre y a realmente estar presente con tus alimentos. Está bien si te terminas todo en una sentada, pero si quieres guardar algo para después, eso también está bien. Comer restos es otra manera de evitar el desperdicio innecesario de alimentos.

3. Come diferentes alimentos, pero también come lo que te gusta

Es posible que las personas compren alimentos que creen que deberían comer en lugar de los alimentos que desean comer, lo que puede ocasionar un desperdicio innecesario de alimentos. En lo particular, no me gusta tomarme mucho tiempo para planear mis comidas, así que se me ocurrió un método a la hora de ir de compras (¡semanalmente!), que garantiza que obtendré una variedad de nutrimentos y sabores. Lo llamo el método 3-2-1: elijo 3 grasas (aguacates, nueces, aceites), 3 proteínas (salmón, pollo, huevos), 3 granos / almidones (batatas, pasta, arroz), 3 frutas y 3 verduras, 2 productos lácteos, 2 comidas especiales (como el chocolate o un alimento que nunca antes haya probado) y 1 condimento. Con este método, creo que es más probable que utilice todos mis alimentos y es más divertido preparar comidas para la semana. ¡Dale una oportunidad!

Es obvio que el mundo se beneficiará al disminuir la cantidad de comida desperdiciada cada día. Si bien puede parecer que no causes un impacto por ti mismo, las estadísticas actuales muestran que solo una persona podría ahorrar cerca de 365 libras de alimentos por año. Y quién sabe, ¡incluso puedes inspirar a tus amigos para que se te unan!